
Si alguna vez se ha preguntado cómo suena la libertad musical, “So What” de Miles Davis es una excelente puerta de entrada. Esta pieza, grabada en 1959 para el icónico álbum Kind of Blue, no solo revolucionó el jazz al introducir la improvisación modal, sino que también capturó una melancolía profunda y reflexiva que aún resuena con fuerza en la actualidad.
Para comprender la importancia de “So What”, hay que viajar a la escena jazzística de finales de los años 50. El bebop, caracterizado por su complejidad armónica y ritmo frenético, dominaba el panorama. Miles Davis, un innovador nato, buscaba un sonido más espacioso y atmosférico. Inspirándose en la música modal, donde las escalas musicales toman mayor protagonismo que las progresiones de acordes tradicionales, Davis concebió “So What” como un lienzo para la improvisación libre.
La estructura de la pieza es minimalista pero poderosa. Se basa en dos modos escalares: D Dorian y Eb Dorian, repetidos a lo largo de sus 9 minutos de duración. Este minimalismo no implica simplicidad. Al eliminar las limitaciones tradicionales de las progresiones de acordes, Davis abrió un espacio para que los músicos exploraran la melodía de manera más libre y profunda.
Los gigantes del jazz en acción: “So What” fue interpretado por una formación excepcional: Miles Davis (trompeta), John Coltrane (saxofón tenor), Cannonball Adderley (saxofón alto), Bill Evans (piano), Paul Chambers (contrabajo) y Jimmy Cobb (batería). Cada uno de estos músicos era un maestro en su instrumento, y juntos crearon un diálogo musical único. La improvisación fluye con una naturalidad asombrosa, cada músico respondiendo a los demás con frases melódicas que se entrelazan y complementan.
Un sonido atemporal:
La melancolía que impregna “So What” es otro de sus rasgos distintivos. La melodía principal, simple pero evocadora, invita a la reflexión. Los solos de saxofón de Coltrane y Adderley son particularmente conmovedores, llenos de una mezcla de alegría y tristeza. El piano de Bill Evans aporta un toque elegante y sofisticado, mientras que el contrabajo de Chambers y la batería de Cobb proporcionan una base rítmica firme.
“So What”: Una ventana al futuro del jazz:
La grabación de “So What” fue un evento significativo en la historia del jazz. La improvisación modal abrió nuevas posibilidades creativas para los músicos, inspirando generaciones posteriores de artistas. El impacto de esta pieza se puede sentir en el sonido de muchos grupos de jazz contemporáneos, desde los conjuntos de vanguardia hasta los trios acústicos más íntimos.
Analizando “So What”:
Para comprender mejor la magia de “So What”, analizaremos algunos aspectos clave:
Elemento | Descripción |
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Estructura | Dos modos escalares (D Dorian y Eb Dorian) se repiten a lo largo de la pieza. |
Improvisación | Los músicos tienen gran libertad para explorar las melodías dentro de los dos modos, creando solos únicos y evocadores. |
Melodía principal | Simple pero memorable, invita a la reflexión y a la contemplación. |
Instrumentación | Trompeta, saxofón tenor, saxofón alto, piano, contrabajo y batería. |
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La belleza de “So What” radica en su sencillez aparente y profundidad real. Es una pieza que invita a escucharla con atención, a dejarse llevar por la corriente melódica y a descubrir los matices y detalles que hacen de esta obra una joya del jazz moderno.
Más allá de su valor musical, “So What” también representa un momento clave en la historia del género. Esta pieza demostró que el jazz podía ser tanto innovador como accesible, abriendo nuevas puertas para la expresión creativa y para conectar con audiencias más amplias.